jueves, 27 de enero de 2011

LECTURA 6

 

“Ciencia y método”   de Roberto Carballo Cortina

1. Significado de la Ciencia

La ciencia, no posee una definición universal, sino que esta varía a lo largo del tiempo y las culturas.
La ciencia es una actividad humana y social, un esfuerzo humano básicamente consciente, cuyos éxitos en la comprensión de la Naturaleza han permitido al hombre acercarse al conocimiento de sus lìmites, de su humanidad; y ha contribuido a desarrollar en él un sentimiento de prepotencia y de fe en la realizaciones humanas. Pero además, y muy importante le han otorgado cierta capacidad para transformar la realidad.
  Sin embargo, la ciencia es también utilizada hoy en día como un instrumento de dominación social. Su misma organización interna está aislada de la generalidad social y básicamente al servicio del poder de una minoría. El cuerpo científico es en general reaccionario al cambio de paradigma; y cuando los científicos explicitan sus descubrimientos lo hacen, primero en un lenguaje no-universal e incomprensible para la mayoría de los seres humanos, y segundo, casi nunca explican sus métodos de trabajo.

2. Ciencia y progreso

 La ciencia pretende explicar y describir la naturaleza, pero con el objetivo de llevar al hombre poco a poco y a través del progreso al ideal humano de libertad. Así pues resulta indudable la relación progreso-ciencia. Todos los estudiosos aspiran a que su especialidad adquiera el estatuto social de ciencia. Pero supone una complicación tan solo el establecimiento de unos criterios universales para demarcar la ciencia. Por ejemplo: para Popper, el criterio debe ser que las hipótesis o teorías puedan ser refutadas por la experiencia; Gino Largo, afirma que el requisito según el cual ha de explicarse la realidad partiendo de ella misma es la característica que define a la ciencia y la que la distingue de la no-ciencia.
 Según Roberto Carballo el crear estos criterios de demarcación conduce inevitablemente a formas dogmáticas de concepción de la ciencia. Pues este tipo de demarcaciones sin en cierto modo represivas y determinadas teorías científicas quedan aisladas.

 
3. Ciencia y Concepción del mundo

La concepción del mundo se definiría como: afirmaciones acerca del mundo físico y de la vida y de códigos de estimación de conducta. Todas estas afirmaciones tienen un carcter inspirador de la investigación científica. Es decir, la ciencia se nutre de los sistemas de ideas vigentes para construirse, consecuentemente la disección y separación entre concepción del mundo como un no-saber y ciencia como conocimiento, es más un esfuerzo analítico y teórico que un problema real.
 Pero la diferencia fundamental, es el uso del método por parte de la ciencia . Así, en la ciencia, lo esencial es el método. Los resultados de la ciencia no son más que un esquema provisional, una verdad relativa. El método científico no sólo nos ofrece la posibilidad de un esquema en un momento dado, sino asimismo los instrumentos para poder sustituirlo por el esquema sucesivo, en su proceso permanente de reelaboración, el método es la base acumulativa en la que se asienta el desarrollo científico.

4. Método e Ideología

Pero el método tampoco es ajeno a la ideología, sino que ésta tiene amplias puertas para penetrar en el proceso científico.  Si aceptamos que los sistemas de ideas juegan un papel complementario y no solamente sustitutivo, en el proceso de conocimiento, y que la compresión científica de la realidad incorpora un componente ideológico, junto a otro científico, que duda cabe que los medios para llegar a este resultado no pueden menos que estar influidos por la ideología del investigador y de su tiempo y circunstancia.

5. Etapas del Método Científico

Existen cuatro etapas de la investigación: descripción, clasificación, explicación y verificación, utilizándose alternativamente tres modos de inferencia: deductivo, inductivo y reductito. La diferencia entre las distintas corrientes metodológicas, se basn fundamentalmente en el énfasis concebido a cada una de estas fases en relación con las demás.
Es por otro lado, requisito para el investigador, el espíritu de observación y capacidad de abstracción, fantasía creadora en intuición, habilidad formalizadora y manual, al tiempo que ser consciente de su propia ignorancia y ansiar la búsqueda de la verdad.
Fases:
1. Para iniciar la investigación de la realidad, se ha de llevar a cabo el acto cognitivo pre-analítico. Donde se encuentra, el marco paradigmático en que se mueve científicamente, la influencia ideológica externa y Una circunstancia personal que lo motiva por sus capas biogénica, psicogénica y sociogénica.
2. Después le sigue un proceso teórico de inferencia inductiva o proceso de abstracción, fase descendente en la que se tratará de describir y clasificar los elementos y relaciones de esa realidad, y cuya finalidad última es la formulación de una síntesis teórica en forma de hipótesis.
 3. Dicha hipótesis se desarrolla deductivamente, para purificarse así de los elementos extraños a la realidad estudiada.
4. Por último, la explicación resultante de la realidad, tiene que superar otro filtro: la contrastación intersubjetiva. Para lo que se expone a la comunidad científica.

6. Método de Investigación y Método de Exposición
 
La investigación sería todo el proceso del conocimiento científico, el objeto a investigar y su análisis.
 La exposición se daría, una vez terminada dicha investigación.

miércoles, 26 de enero de 2011

Enrique morente

Quería hacer mi pequeño homenaje en este blog, a uno de los artistas más grandes que ha dado este país. Que se nos ha ido recientemente y del que todavía lamento su marcha. Enrique Morente...

Aquí cantando con su hija, estrella morente:

 http://www.youtube.com/watch?v=Wg9XgsO-6PI&feature=related

http://www.youtube.com/watch?v=aDUb2hbIA4U&feature=related

LECTURA 5

 

“EL MECANISMO DE LA INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA”   G. LONGO

La investigación surge siempre a partir de la observación, es decir, el conocimiento se inicia a partir de los hechos, a partir de la observación de los mismos. Una observación cualquiera supone ya en sí misma un principio de análisis, ya que la observación lleva consigo un proceso de selección del objeto a observar, asi como ciertas comparaciones y deducciones.
De por sí, los hechos no explican nada, así pues, la tarea de la investigación científica no consiste solamente en registrar y coleccionar hechos, sino mas bien en descubrir la verdadera esencia de los fenómenos.
La primera tarea de la investigación consiste en observar los hechos, en seleccionar los más significativos, en descubrir las relaciones que los unen entre si y en evidenciar en cada hecho concreto los aspectos más sustanciales o significativos. Trás esto, el investigador debe encajar esos en un esquema coherente.

La segunda etapa del trabajo científico consiste en la formulación de una hipótesis que explique el conjunto de los hechos de forma lógica y coherente. Para esta etapa e esencial el desarrollo de la creatividad y la fantasía.
Así la fantasía permite al hombre concer la realidad y transformarla. Conocerla, ya que permite formular las hipótesis que más tarde se comprobarán de acuerdo con los hechos. Y modificarla, pues permite crear mentalmente la imagen de aquello que se pretende alcanzar.  La fantasía se complementa con la intuición, gracias a la cual el pensamiento, no analiza todas las versiones mentales, sino únicamente las más verosímiles o más racionales.
 Y ambas han de estar controladas por una lógica férrea y rigurosa.
Antes de pasar al siguiente paso, es necesario comprobar la verosimilitud de las hipótesis planteadas y para ello es necesario volver a la observación, ampliando si es necesario el campo de observación a nuevos fenómenos.

La última etapa consiste en modificar o sustituir las hipótesis anteriormente formuladas con los resultados de la comprobación realizada anteriormente.

Se puede concluir que toda ciencia tiene un objeto de investigación concreto, utiliza un determinado método de investigación, al aplicar dicho método, da en cada etapa del proceso, una visión de conjunto del sector de la realidad que constituye su campo de investigación, y en consecuencia, una determinada visión científica de la realidad. El método de investigación evoluciona con cada nueva etapa del desarrollo científico y es enriquecido a medida que van sucediéndole las visiones de la realidad que ofrece la ciencia, mediante un proceso acumulativo. O lo que es lo mismo, que mediante sucesivas investigaciones la visión de la realidad que ofrece la ciencia se enriquece, se amplia, se hace más profunda, se modifica en sus particulares.
Por otro lado, la visión de la realidad que la ciencia ofrece está formada por dos elementos:
- los hechos y relaciones comprobadas científicamente.
- los hechos y relaciones deducidos lógicamente, hipotéticos, temporalmente supuestos, que integran a los momentos aislados de la visión en u conjunto coherente.
 
En la ciencia lo esencial es el método. Asi pues, se podría decir que el objeto de la ciencia no es solamente intentar ofrecer una visión de la realidad ajustado, sino que el aspecto esencial de toda ciencia es su método de investigación

martes, 25 de enero de 2011

"¡¡¡Que se vayan todos!!!!"

http://www.elpais.com/articulo/internacional/policia/egipcia/cientos/manifestantes/enfrentan/Cairo/dia/ira/elpepuint/20110125elpepuint_9/Tes

Tunez, Egipto...continúan las revueltas. Parece que los ciudadanos de segunda, los ciudadanos de la periferia, comienzan a ser conscientes de su capacidad creadora de revuelta y no dudan en salir a la calle a demostrar su descontento con un mundo que siempre les deja las migas del pastel. Mientras tanto la prensa burguesa de occidente marea la perdiz señalando y situando en el asiento de los acusados a los gobiernos represores y dictatoriales, los mismos gobiernos que los propios países del centro del sistema-mundo han amparado e incluso apoyado bajo políticas de conveniencia. Y aunque siguen haciendo oidos sordos, acabarán por escuchar, porque aunque sean otras las palabras, el pueblo dijo una vez en argentina y lo sigue repitiendo en todo el globo: "¡Qué se vayan todos!"


Bersuit- Se viene: http://www.youtube.com/watch?v=tS_tmDHk2qk&feature=related

"TEORÍA DEL DESARROLLO CAPITALISTA" Paul M. Sweezy ( II )

II.EL PROBLEMA DEL VALOR CUALITATIVO:

  1. Introducción:

Marx basa su primer capitulo de “El Capital” en hablar sobre la mercancía. Que sería todo aquello que se produce para el cambio más que para el uso del productor.
Autores anteriores a Marx como Adam Smith, asociaban directamente esta producción de mercancías con la división del trabajo. Dotándole a la misma de una posición firme dentro de los fenómenos naturales. Marx sin embargo, plantea la producción de mercancías como algo contingente que no esta ligada necesariamente al cambio.
 Este visión marxista otorga al análisis de las mercancías un valor cualitativo, frente a la visión estrictamente cuantitativa de los economistas anteriores. Es decir, detrás de las relaciones explicitas de intercambio, hay una relación específica, históricamente condicionada, entre produtores, que se analiza desde una visión cualitativa.

  1. Valor de uso:

Toda mercancía tiene un doble aspecto, el valor de uso y el valor de cambio.
 El valor de uso, es la utilidad de un determinado objeto y  es una relación entre el consumidor y el objeto consumido. Es decir, no supone directamente un relación social. Y es por ello que Marx, aunque otros economicistas no lo hallan hecho, excluye su estudio de la economía política, ya que para él, las categorías de la economía política requieren ser categorías sociales.
 Pese a esto, el valor de uso aunque no sea una categoría económica en sí misma, juega un papel fundamental en el estudio de los fenómenos económicos.

  1. Valor de cambio:

Las mercancías poseen un valor de cambio las unas en relación con las otras. Este valor es un valor cuantitativo. Y esta relación es considerada de importancia por Marx en el estudio de la economía política, porque a diferencia del valor de uso, esta si que presupone una relación social. La de los propietarios de las mercancías.
 Pero la importancia de esto va más alla, el valor de cambio de una mercancía, lo que nos muestra precisamente es la relación obligada entre todos los productores, o lo que es lo mismo la división del trabajo.

  1. Trabajo y Valor:

Marx comprendió que el valor de cambio solo tenía sentido bajo la propiedad de la mercancía. Dicha propiedad, se encuadra dentro del concepto del producto de trabajo, s decir, es tuyo porque tu lo has producido. De este modo, el trabajo sería el valor que yace oculto tras el valor de cambio.

En el análisis del trabajo, además, podríamos señalar dos aspectos. Uno sería el de trabajo util, en relación con el valor de uso. Que es todo aquel trabajo destinado a la producción de un determinado objeto al que se le quiere otorgar un valor de uso concreto. El otro sería el trabajo abstracto, en relación al valor de cambio. Pues cuando se le otorga a una mercancía un determinado valor de cambio se asume en ella cierto grado de trabajo humano en abstracto, independiente del trabajo útil real que haya detrás.

  1. Trabajo abstracto:

El trabajo abstracto es un concepto que ocupa un lugar importante en el pensamiento de Marx. Se podría emplear el término trabajo en general como sinónimo de trabajo abstracto. Cuando se habla de trabajo abstracto, quiere decir que estamos hablando del trabajo humano, sin incurrir en las diferencias que pueden existir entre un tipo de trabajo y otro.
Este término, acuñado y trabajado en profundidad pero originario de economistas clásicos como Smith, tiene un sentido total en el contexto del sistema capitalista, y Marx lo vio con total claridad. En la era capitalista, los trabajos van adquiriendo una mayor temporalidad, y este enorme grado de movilidad laboral obliga a entender el  trabajo en su conjunto, al margen de las formas que pueda adoptar en un determinado momento, lo que nos permite entender la suma de la fuerza de trabajo social en su totalidad. Que es lo realmente importante en un análisis macroeconómico sobre la capacidad productora de riqueza de la sociedad.

  1. La relación de lo cuantitativo con lo cualitativo en la teoría del valor:

Una mercancía adquiere un determinado valor de cambio basado en el gasto de trabajo abstracto del total de la sociedad que se ha llevado a cabo para la producción de la misma. Esto supone a primera vista un resultado estrictamente cualitativista, pero Marx le añade a esto el grado cuantitativo, pues el trabajo abstracto puede medirse en términos de unidades de tiempo cuantitativas.  De esta manera se relaciona el valor cualitativo on el valor cuantitativo en Marx. Así, en palabas de sweezy: Para Marx, el valor de cambio es tan sólo la “forma fenomenal” bajo la cual se oculta el valor mismo.”

  1. El carácter fetichista de las mercancías:

El análisis expuesto de las mercancías nos lleva a identificar en el valor de cambio una relación entre productores en un sistema determinado de división del trabajo. Así como la suma de fuerza de trabajo de la sociedad  como el total del trabajo particular de cada individuo. Las ideas a que esta forma de organización social da origen a menudo tienen sólo una relación remota y desnaturalizada con las relaciones sociales reales que yacen bajo ella. En su doctrina del Fetichismo de la Mercancía, Marx fue el primero en percibir este hecho y darse cuenta de su decisiva importancia para la ideología de la época moderna.

En la producción de mercancías la relación básica entre los hombres “adopta”, a sus ojos, la fantástica forma de una relación entre las cosas. Esta materialización de las relaciones sociales es el corazón y la médula de la doctrina del Fetichismo de Marx.

En los periodos anteriores de la historia, las relaciones de producción tenían un carácter personal directo, y por tanto, tal materialización de las relaciones sociales era evidentemente imposible. El fenómeno de la materialización de las relaciones sociales adquiere importancia decisiva solo cuando la producción de mercancías adquiere un desarrollo tan alto y una difusión tan grande como para dominar la vida de la sociedad. El productor individual trata con su prójimo sólo a través del mercado, donde los precios y las cantidades vendidas son las realidades sustanciales y los seres humanos no son más que sus instrumentos. Este estado de la sociedad es un estado en que el proceso de la producción tiene dominio sobre el hombre en lugar de ser controlado por él, y por consiguiente el carácter real de las relaciones entre los productores mismos es deformado y oscurecido.

Una vez que el mundo de las mercancías ha realizado por así decirlo, su independencia, y sometido a los productores a su dominio, estos últimos empiezan a mirarlo en mucho del mismo modo que ven ese otro mundo externo al cual tienen que aprender a adaptarse, el mundo de la naturaleza misma.
 La materialización de las relaciones sociales ha ejercido una profunda influencia en el pensamiento económico tradicional, y por lo menos en otros dos sentidos importantes. En primer lugar, (Valor, renta, salario, ganancia, interés, etc...) Estas categorías de la economía capitalista, han sido consideradas como si fueran las inevitables categorías de la vida económica en general, y los sistemas económicos anteriores han sido vistos como versiones imperfectas o embrionarias del capitalismo moderno y juzgadas en consecuencia. Por otro lado, la atribución de poder independiente a las cosas no es en ninguna parte más clara que en la división tradicional de los “factores de producción” en tierra, trabajo y capital, de cada uno de los cuales se piensa que “produce” un ingreso a sus propietarios. “Tenemos mistificación completa del modo de producción capitalista, la transformación de las condiciones sociales en cosas, la mezcla indiferenciada de las condiciones materiales de la producción con sus formas históricas y sociales. Es un mundo falseado, trastornado.

Marx, además añade lo siguiente para desenmascarar las repercusiones del fetichismo de la mercancía. La forma de producción de mercancías constituye el velo más eficaz posible para ocultar el verdadero carácter de clase de la sociedad capitalista. Cada quien aparece ante todo como un simple propietario de mercancías con algo que vender. Como propietarios de mercancías, todos ellos están en un plano de igualdad perfecta; sus relaciones mutuas no son las relaciones entre amo y siervo de un régimen de status personal, sino las relaciones contractuales entre seres humanos libres e iguales. El obrero no advierte que su falta de acceso a los medios de producción lo obliga a trabajar en condiciones dictadas por aquellos que tienen el monopolio de los medios de producción y que, por consiguiente, está siendo explotado para beneficio de otros, al igual que el siervo que era forzado a trabajar cierto número de días en la tierra del señor a cambio del privilegio de labrar un jirón de tierra para sí. Por el contrario, el mundo de las mercancías aparece como un mundo de iguales. El obrero enajena su fuerza de trabajo, la cual permanece opuesta a él como cualquier mercancía a su propietario. La vende, y mientras se le pague su verdadero valor, todas las condiciones del cambio honrado y justo están satisfechas. Esta es la apariencia, y quienes consideran las formas capitalitas como naturales y eternas admiten la apariencia como verdadera representación de las relaciones sociales.
La teoría del valor cualitativo con su corolario en la doctrina del Fetichismo de la Mercancía, es el primer paso esencial en el análisis marxista del capitalismo. Quien no haya entendido esto ha entendido poco del método crítico de Marx

sábado, 22 de enero de 2011

"Teoría del desarrollo capitalista" Paul M.Sweezy

Capítulo I . EL MÉTODO DE MARX:

Se exponen en este capítulos los elementos principales de la actitud de marx ante la economía política.

  1. El uso de la abstracción:

Marx es partidario del método abstracto deductivo, en sus palabras: “En el análisis de las formas económicas, ni el microscopio ni los reactivos químicos son útiles. La fuerza de la abstracción debe remplazar a uno y a otro”.

Más concretamente, el método empleado por marx es el de las aproximaciones sucesivas, que consiste en avanzar paso a paso de lo más abstracto a lo más concreto.
 Pero para hacer un correcto uso de la abstracción es de interés prioritario saber cuales son los elementos esenciales del problema a investigar, es decir, la tarea de la abstracción es poner de relieve lo esencial y de este modo hacer posible su análisis.

En el caso de Marx, el elemento esencial de su estudio era claro. Marx siempre estuvo preocupado por los problemas sociales, por la sociedad en su conjunto y más concretamente por el cambio social. Marx entendió que la clave del cambio social, se hallaba en los movimientos del modo de producción. Así , la meta de Marx, sería “poner al desnudo la ley económica del movimiento de la sociedad moderna”. Pero, ¿Cuál será para Marx el aspecto esencial del problema? La lucha de clases. Marx se basó en los supuestos dialécticos expuestos por hegel y los aplicó a sus temáticas e intereses, de este modo, la idea de Hegel de que el desarrollo se lleva a cabo a través del conflicto entre fuerzas opuestas; Marx la aplicó al devenir histórico y llegó a la conclusión de que era la lucha de clases el motor de la historia. Así, de este modo se entiende que los conflictos de clase son los elementos que han de ser aislados y analizados por el método de abstracción.
 La colocación de la relación entre clases (burguesía y proletariado) en el centro de la investigación y la utilización sobre ella del método de abstracción que la aísla y la reduce a formas más puras, requiere de dos pasos:
 Primero, hay que mantener alejadas todas las relaciones sociales, exceptuando aquellas que se dan entre capital y trabajo, para introducirlas poco a poco en una posterior etapa.
 Segundo, la relación cápital-trabajo, ha de reducirse a su forma o formas más importante.

 Pero, el uso de la abstracción pese a lo que pueda parecer no supone el alejarse de la realidad, sino todo lo contrario, el propósito de la abstracción no es alejarse del mundo real, sino aislar ciertos aspectos del mundo real para fines de investigación intensiva.

  1. El Carácter histórico del pensamiento de Marx:

Para Marx, la realidad social es el proceso histórico, un proceso que no conoce ni finalidad ni estaciones de parada. Pero dentro de la visión historicista de marx, el proceso del cambio social, no es puramente mecánico. Es más bien el resultado de la acción humana, pero de una acción que se encuentra limitada y acotada por la sociedad en que vive.
El carcter histórico marxista, permite mantenerse fuera del sistema y criticarlo en su conjunto pues entiende el grado de transitoriedad del capitalismo, como un momento más de la historia.  

viernes, 21 de enero de 2011

LECTURA 3




Manuel Sacristán: “¿Qué es una concepción del mundo?”, introduciendo a  F.Engles en el Antidüring.

¿Qué es una concepción del mundo?

Son la serie de principios que dan razón a la conducta de un sujeto, aunque éste no se lo formule de forma explicita. La mayor parte de la consciencia de la vida cotidiana se desarrolla a través de principios o creencias muchas veces implícitas, “inconscientes” en el sujeto.
 Estos principios o creencias inspiradores de la conducta cotidiana, se hallan explicitos en la cultura de la sociedad en que vive. Pues la cultura contiene una especie de código regulador de la conducta, así como una seria de proclamaciones que otorgan definiciones a la naturaleza, el mundo físico y la vida. De este modo, teoría y práctica se halla relacionadas bajo todo un sistema de juicios de valor.

No obstante el  que existe una formulación explicita de estas afirmaciones sobre la concepción del mundo, no nos asegura un verdadero conocimiento de la realidad, ni siquiera de la concepción del mundo que opera en dicha sociedad, ya que muchas veces dichas afirmaciones provienen de una superestructura(en el sentido marxista del término) que crea este tipo de afirmaciones bajo un interés ideológico.

 La diferencias entre la concepción del mundo y la ciencia positiva son claras. Mientras que las concepciones del mundo dan lugar a credos religiosos o sistemas filosóficos, la ciencia positiva busca mecanismos que aporten visiones objetivas de la realidad. Esto ha hecho que los sistemas filosóficos al verse desplazados por la ciencia se refugien en supuestas verdades superiores a las de la ciencia.
Sin embargo, estas pretensiones fracasan a mediados del siglo XIX, con la disgregación del sistema filosófico de Hegel, el más ambicioso de la historia. Esto se debe a que el conocimiento científico busca ir más allá y desarrollar mecanismos que permitan encontrar previsiones exactas a costa de construir y manejar conceptos artificiales. Además, este conocimiento se caracteriza por su intersubjetividad (que todas las personas adecuadamente preparadas entienden su formulación del mismo modo). Las tesis de la vieja filosofía sistemática carecen de estas dos características. 

El que las concepciones del mundo carezcan de estas dos características del conocimiento positivo se debe a que la concepción del mundo contiene esencialmente afirmaciones sobre cuestiones no resolubles por los métodos decisorios del conocimiento positivo, que son la verificación o falsación empíricas y la argumentación analítica. Pero el hecho de que estos dos tipos de conocimiento se diferencien en estos rasgos, no implica que no puedan sostenerse o apoyarse mutuamente, ya que se encuentran en relación, así: Una concepción del mundo que tome a la ciencia como único cuerpo de conocimiento real se encuentra visiblemente por delante (intentará construirse de acuerdo con la marcha y los resultados de la investigación positiva) y por detrás (como visión general de la realidad, la concepción del mundo inspira o motiva la investigación positiva misma) de la investigación positiva. Según el programa positivista, es importante darse cuenta de que cuando la ciencia se mece en la ilusión de no tener nada que ver con ninguna concepción del mundo, el científico corre el riesgo de someterse inconscientemente a la concepción del mundo vigente en su sociedad. Es por ello, que es necesario tener en cuenta dicha relación para poder comprender con claridad la distinción entre conocimiento positivo y concepción del mundo.

-La concepción marxista del mundo:

La concepción marxista del mundo, es decir aquella que se caracteriza por el materialismo y la visión dialéctica, está movida por la aspiración de liberar la consciencia, que se encuentra desfigurada por la presencia en la conducta humana de factores no reconocidos o idealizados. Por eso la concepción marxista, es una concepción del mundo explícita.
  La liberación de la consciencia presupone la liberación de la práctica. Es decir, tiene que sostenerse y actuarse sobre las ciencias reales, pues el nuevo materialismo no es una filosofía, sino una nueva concepción del mundo. Supone  una concepción de la filosofía no como un sistema superior a la ciencia, sino como una parte del pensamiento científico. La concepción del mundo materialista no quiere más que explicar la motivación de la ciencia misma. Esta motivación puede llamarse “inmanentismo”: el principio de que la explicación de los fenómenos debe buscarse en otros fenómenos, en el mundo, y no en instancias ajenas o superiores al mundo.

Este materialismo es un de los aspectos en los que se basa la concepción marxista del mundo. El otro es el principio de la dialéctica. Este no se inspira en el hacer científico-positivo sino en las limitaciones del mismo.

La ciencia positiva realiza el principio del materialismo a través de una metodología analítico-reductiva. Con la que la eliminación de factores irracionales en la explicación del mundo procede a través de una reducción analítica de las formaciones complejas hacia formas menos complejas y más homogéneas cualitativamente, con tendencia a una reducción tan extrema que el aspecto cualitativo pierda toda relevancia.

El análisis reductivo practicado por la ciencia tiende a limitarse en lo esencial al manejo de relaciones cuantitativas o al menos, materialmente vacías, formales. Obviando conceptos con centenido cualitativo. Éste análisis tiene éxito por dos cuestiones: Por un lado, permite penetrar muy material y eficazmente en la realidad, porque posibilita el planteamiento de preguntas muy exactas; y Por otro lado posibilita la creación de conceptos más adecuados, aunque sea simplemente por la destrucción de viejos conceptos inadecuados.

Pero con ese tipo de conocimiento se pierde una parte de lo concreto, precisamente la parte decisiva para la individualización de los objetos. Y aunque suministra todos los elementos de confianza para una comprensión racional de los mismos, no otorga su totalidad, su consistencia concreta. Y es aquí donde entra en juego la dialéctica, pues el ámbito de relevancia del pensamiento dialéctico es precisamente el de las totalidades concretas.
Así pues, la pretensión de la dialéctica materialista consiste en recuperar lo concreto sin hacer intervenir más datos que los materialistas del análisis analítico-reductivo

lunes, 10 de enero de 2011

Lectura 1

LECTURA 1:
"características del conocimiento científico" 

¿Qué es la ciencia?

 “Es cualquier tipo de conocimiento que haya sido objeto de esfuerzos conscientes para perfeccionarlo. Estos esfuerzos producen hábitos mentales -métodos o técnicas- y un dominio de los hechos descubiertos por esas técnicas”. Esta es la definición de Schumpeter, Este economista tiende a refugiarse en el puro empirismo. Con esto,  Podemos hacer uso de su pensamiento siempre y cuando nos mantengamos en un terreno estrictamente empírico, tratemos de determinar los fenómenos tal y como aparecen externamente.

Para profundizar e ir más allá de lo que schumpeter cuenta, G.Longo afirma que la finalidad del conocimiento y de la investigación científica, consiste en descubrir las normas o leyes del universo empírico que rodea al hombre, de la realidad objetiva en la que éste se halla inmerso. Este conocimiento (científico) ha de cumplir tres requisitos.

1 Debe proporcionar una descripción de esta realidad, y al mismo tiempo debe explicarla. “Una auténtica descripción de una cosa... es al propio tiempo su explicación” (F.Engels, El problema de la vivienda). Pueden existir muchísimas definiciones de ciencia, tantas como aspectos o propiedades de un objeto. Pero por otro lado, como dice Hegel, tiene por finalidad mostrar la necesidad de los objetos y no dar una simple descripción de los mismos. Debe reconstruir idealmente el esquema de desarrollo de la realidad en el que cualquier objeto aislado halle su lugar y su explicación.

2  No puede conformarse con cualquier explicación de la realidad. Para que exista un verdadero conocimiento científico, la realidad objetiva tiene que ser explicada a partir de ella misma, sin introducir momentos, elementos o explicaciones que no pertenezcan a tal realidad. Más que explicar la naturaleza, la Humanidad tiene la obligación de conocerla, según Hegel. La ciencia más que explicar el mundo debe comprenderlo. Esto hace que la historia del conocimiento científico sea en realidad la historia de cómo la Humanidad se ha explicado el mundo real. Atribuyendo a los fenómenos causas y relaciones fantástica, hipotetizando causas causas y relaciones reales y  por último conocer las relaciones que se establecen objetivamente entre los fenómenos de la realidad.

Longo plantea en el texto que la característica que distingue ciencia de lo que no lo es, es el principio por el cual la realidad ha de explicarse partiendo de ella misma.El desarrollo coherente de este principio, su aplicación sin excepción a todos los fenómenos de la realidad conduce directamente al materialismo filosófico. Como dice Engls “Concebir materialistamente la naturaleza no es sino concebirla pura y simplemente tal y como se nos presenta, sin aditamentos extraños”.

Por lo tanto, dice el autor del texto, una filosofía coherentemente científica ha de ser materialista, y por tanto basarse en la necesidad de estudiar la realidad objetiva tal y como es, explicándola partiendo de ella misma. El marxismo cumple estas características, y por tanto constituye la primera concepción del mundo basada total y exclusivamente en la ciencia. 


3 Como el hombre busca conocer el mundo para poder modificarlo según sus necesidades. El conocimiento científico, ha de ser únicamente una parte de la actividad humana, solo uno de sus aspectos. Por eso el conocimiento nunca puede llegar a ser un fin en si mismo. 
El fundamento más esencial y más próximo del pensamiento humano es la transformación de la naturaleza. La inteligencia humana ha ido creciendo en la misma proporción en que el hombre iba aprendiendo a transformar la naturaleza. El pensamiento y la acción, el conocimiento y la praxis se condicionan mutuamente, están estrechamente ligados y son inseparables.
La praxis para que pueda desarrollarse, requiere de un buen conocimiento de la realidad, en la cual y sobre la cual el hombre se prepara para actuar. El conocimiento (la cognición), es premisa de la acción, mientras que la acción es el fin último del conocimiento. 
Pero esto no quiere decir que la ciencia halla de ser valorada por su utilidad, sino por la capacidad para adecuar sus resultados a la realidad.Es decir, la actividad cognoscitiva ha de tratar de llegar a la cognición de lo real, y esta cognición será lo que permitirá la futura acción. Pero la ciencia jamás tendrá por objetivo la praxis La ciencia nunca tendrá por objetivo la praxis, sino la busqueda de la verdad. Y si conocemos la realidad, surgirán los instrumentos técnicos que nos permitirán modificarla. 

Pero además, existe otra diferencia entre cognición y praxis importante desde el punto de vista metodológico.  Y es el hecho de que la primera es individual y la segunda es colectiva. El hombre debe coordinar su acción con los demás que le rodean, pero nunca podría coordinar su conocimiento. No obstante, el autor también hace alusión al hecho de que aunque no hay que olvidar que tanto acción como conocimiento son fenómenos sociales, pues el hombre es un ser necesariamente social.

De este modo, el conocimiento no debe dirigir a la acción, sino que la debe hacer posible, tiene marcar un camino a seguir, el camino de lo que debería tratar de hacer.

miércoles, 5 de enero de 2011

Las marcas


            LAS MARCAS EN LA SOCIEDAD UNIDIMENSIONAL


“El occidental, le preguntó al zapoteco:
-Pero... ¿esta tierra es tuya?
Y el zapoteco tras pararse a pensar, como solo lo hacen los humanos que todavía piensan. Le respondió:
- Esta tierra es mía para algunas cosas sí y para otras no, y es de la comunidad para todas las cosas.
 El occidental no entendió nada y continuó preguntando:
- ¿Y el maíz, el maíz que tu recoges, acaso ese no es tuyo?
El zapoteco que comenzaba a incomodarse, respondió:
- Acaso tu nariz es más de tu cráneo que de los dedos de tus pies, acaso es posible poseer lo que tu mismo eres...
- ¿Pero es que tu eres un maíz?
-Claro que no, yo soy un zapoteco y el maíz es el maíz. Pero tanto él como yo, somos la misma comunidad indivisible.”


Para entender el significado y la importancia de las marcas (entendiendo por marca el signo distintivo de un producto en el mercado) hay que comprender primero dos de los elementos que vertebran la implícita ideología capitalista. Por un lado la mercantilización totalitarista de la vida y por otro el concepto de identidad individual.
  Estos dos elementos, y su desarrollo a lo largo de la historia de occidente y del mercado global  han hecho posible la aparición y extensión de la marca.

-        DESARROLLO DE LA IDENTIDAD INDIVIDUAL:

 Para comprender con plenitud el concepto de la identidad individual, o al menos aquella parte que
 nos compete en este ensayo (aquella que de veras supone un elemento con repercusión en lo macrosocial)  es necesario remontarse a los comienzos de la edad moderna. Más concretamente al desarrollo de las ciudades y con ello de la burguesía.
 Con la ruptura de la organización gremial y demás formas de organización colectiva del trabajo y la producción, se comienza a extender un patrón de conducta social que no responde estrictamente a los intereses de los explotados pero que también es asumido por estos. Profundizaré en esto: Durante toda la edad media las castas beneficiarias de la explotación, tenían una identidad concreta que respondía a su estatus y que era solo asumible por estas castas. En el lado opuesto, los explotados como ya he comentado, se organizaban en torno a formas de producción colectivas que le otorgaban su identidad. Tanto en la ciudad (gremios) como en el campo (aldeas). EL desarrollo de la ciudad supone por tanto la ruptura de estas identidades y la aparición de la identidad burguesa que se establecerá como modelo para todos los estratos sociales, ya que no requiere de un estatus a priori. La diferencia crucial de este nuevo modelo de filiación consiste en la ruptura del elemento colectivo. Cualquiera independientemente del dinero que tenga comienza a ajustarse a la idea de que es el único responsable de sus fracasos y bienaventuranzas...
 La aparición de esta nueva identidad hegemónica supone la piedra angular para que se desarrolle el capitalismo y el mercado global.
 Este nuevo aspecto de vida en sociedad, la sociedad de individuos atómicos, es el elemento ideológico de mayor importancia en el devenir histórico de los últimos siglos. Partiendo de la revolución francesa y la extensión del liberalismo hasta llegar a nuestro días.
 Pero pese a esto, ha sufrido una gran evolución y se ha enfrentado por supuesto a fuerzas detractoras. No es extraño por tanto comprender como el movimiento obrero y demás fuerzas de antagonismo basan sus ideologías de contrapoder en la organización colectiva de la vida.

 No obstante para encuadrar estas reflexiones en torno al tema a estudiar, lo que realmente nos interesa analizar es el devenir de los últimos años, el desarrollo del hombre unidimensional (H. Marcusse).
El hombre unidimensional es aquel que se encuentra sometido al régimen totalitario que impone la sociedad de consumo. Una sociedad que sofistica los métodos de disciplinamiento de la fuerza de producción. Sumiendo a los individuos en la doble  recreación del “yo”, el yo productor y el yo consumidor. Producción y consumo se convierten de este modo en dos caras de una misma moneda. Y llevan a occidente a la transformación total de todos los aspectos de la realidad vital.
Por otro lado, le realidad en su totalidad se convierte en objeto mercantilizable, lo que lleva al ser a verse sumergido en una constante compra-venta de todas sus posibilidades vitales, de ahí el término de hombre unidimensional.
 De este modo la identidad de los productores, que se había encontrado hasta ahora relacionado con el entorno de la fábrica y los centros de producción, pasa a depender también de las formas de consumo y los modelos de vida derivados de ellas. Así, los productos y los bienes de consumos tanto materiales como inmateriales, van dotando poco a poco al individuo de su identidad, una identidad reflejo de los mismos. Las formas de vida del hombre unidimensional responden a formas de consumo y son estas las que le dotan de su personalidad y sus conductas. La publicidad y los mass media, abrasan la subjetividad con constantes ataques. Y de esta forma se unidimensionaliza el hombre  y se le invita a participar del nuevo régimen implícitamente totalitario.

-         LOS TRADEMARKS Y EL CONSUMO DE MASAS:

 En el contexto del sistema de comercio capitalista, las trademarks tienen una función obvia, tanto a la hora de firmar patentes como de publicitar productos. Pero el porque se han convertido en un elemento de enorme importancia a nivel microsocial, requiere una mayor profundidad de análisis.

Como comentaba en el punto anterior, en el mundo occidental actual, los bienes de consumo se convierten en el significante, en el elemento identitario del individuo. Tú eres lo que eres porque compras lo que compras y lo compras donde lo compras. Se crea además, de esta manera todo un lenguaje basado en esta banalidad del consumo. Un lenguaje que se desarrolla en torno a una serie de simbología implícita y explicita que cerca los modelos sociales y los inserta además en una suerte de ranking de status imaginario. Es decir, este lenguaje describe en que gastas tu dinero o tu tiempo y en base a ello te sitúa en un determinado nicho social.
 Con estos apuntes es fácil comprender la importancia a nivel social de las marcas. Las marcas se convierten en las vocales del abecedario que conforma este lenguaje. Explicitan unos modelos concretos de consumo y de este modo significan al individuo. Por ello se convierten en una herramienta fiel a la hora de construir identidades.
 No importa lo que realmente cuesten las materias primas, o el tiempo de fabricación y gastos de producción, el valor de cambio de los productos no responde a eso. El precio que reseña a una marca será quien defina en el imaginario colectivo que lugar ocupan las personas que consumen dicha marca. Si un individuo paga 100 euros por una camiseta necesita que de ello quede constancia, que en su presentación pública se incluya el dinero que se gasta en la ropa.
 De igual modo que el amante de la montaña necesita que en su imagen pública se incluyan referentes a sus actividades de ocio y para ello las marcas son fundamentales.
 Los mass-media y la masiva publicidad nos ayudan a crear los imaginarios oportunos para cada marca y de este modo crear modelos de vida en torno a ella. Todas las marcas se encuentran insertas en estos modelos más amplios que dotan a los individuos de la identidad necesaria para desarrollarse vitalmente en el sistema totalitario de la sociedad de consumo del que somos esclavos.  

-         BIBLIOGRAFÍA:

 El Hombre Unidimensional.  Marcusse, Herbert  ed. Ariel: 1965

 La bala y la Escuela. Gª Olivo, Pedro  ed. Virus
 NoLogo  Klein,Naomi ed. Paidos 1999.

 En defensa de la intolerancia. Zizec, Slavoj ed. Sequitur: 2007